El partido entre Reducto y Atenas está en duda, por un virus que afectó a uno de los planteles y que podría no presentarse.
En los últimos días, gran parte del plantel del celeste del manicomio se vio afectado por un virus que les generó fiebre, dolor en el cuerpo e incluso vómitos. Lo mismo le sucedió a los integrantes del cuerpo técnico, por lo que el equipo no ha entrenado desde el fin de semana.
De acuerdo con fuentes de la institución, se solicitó tanto a la FUBB como a las alas negras postergar el partido, principalmente por un tema sanitario, pero no hubo voluntad de las partes.
Tanto jugadores como cuerpo técnico fueron certificados por médicos y, a pesar de desconocer cuál es el virus, quedó claro que fue de alto contagio. Vale decir que todos los que fueron testeados por COVID-19 hasta el momento, dieron negativo.
Desde Reducto, se maneja la posibilidad de no presentarse, principalmente por el riesgo que implicaría de aumentar los contagios, incluso sobre el equipo rival.
El sentido común hace creer que es una situación que debería considerarse y el juego se debería reprogramar. En caso contrario, de no jugarse, Atenas pasaría directamente a semifinales.