En un partido excelso y parejo en su quinteto titular, Nacional logró una victoria casi de principio a fin y empezó pisando fuerte en esta edición de la Liga.
Cancha repleta en Malvín, para el partido inaugural 2018-2019. El encuentro comenzaba con lo que sería la tónica del resto del mismo. Malvín con buena rotación de bola y lanzamientos exteriores contra un elenco tricolor que basaba su ataque en la pintura con situaciones forzadas con buenas y malas decisiones. A partir de la mitad del primer cuarto, Nacional ajustó en defensa y comenzó a aparcer la figura de Tony Danridge. 20 a 18 el primero.
En el segundo fue donde se dio el quiebre y se marcó el partido donde Batista dominaba el rebote en ambas tablas y Tony era incontrolable en cancha abierta y el 1×1. Y asi, aprovechando la ausencia de Lampropoulos que estaba en el banco, se cerraba el segundo cuarto 42 a 35
En el segundo tiempo Nacional de dedicó a hacer mantenimiento, ante un equipo playero que nunca supo volver a estar en partido. Batista en los rebotes y Tony en la conversión, seguían haciendo estragos. Serrés sacaba la cara por el equipo de la gaviota. 61 a 53 se iba arriba el conjunto de La Blanqueada.
En el último cuarto era Mazzarino quien esbozaba una reacción pero el aro no se abría mientras que Tony tenía un tubo y una canaleta directa al cesto. La explicación final se basó en el amplio dominio en ambas tablas de Batista y el excelente porcentaje en lanzamientos de Dandridge.
Contundente victoria 79 a 66 que permite picar en punta e ir paso a paso tras el objetivo final.