Perú eliminó a Uruguay de los cuartos de final. Fuente: Selección Peruana
Las comparaciones son odiosas, aunque en este caso no queda otra que sumergirse en la polémica. Argentina se fija en Uruguay y admira el proyecto Tabárez, un solo entrenador en 13 años de gestión, aquel que consiguió un cuarto puesto en el Mundial de Sudáfrica 2010 con equipo normal, la Copa América 2011 y las clasificación a tres Copas del Mundo de forma consecutiva. Sin embargo desde acá, tenemos una visión distinta de nuestros “hermanos”.
“La Albiceleste” parece ser el “hermano problemático” con inconvenientes individuales (dentro y fuera del plantel), de dirigencia y de entrenadores, algo que según muchos, nunca tuvimos en nuestro seleccionado. Pese a esto han logrado jugar cuatro finales dentro de nuestro “proceso”. No ganaron ninguna y son señalados constantemente, por su prensa y por todo el mundo, pero a la larga…
Perdieron una con Brasil en 2007, dos veces con el mejor Chile (el mismo que nos eliminó en 2015 por los cuartos de final) de la historia, y otra con la Alemania que goleó 7-1 al anfitrión.
Cayó en cuatro finales, tres de Copa América y una por el Mundial de Brasil 2014. Han pasado infinidad de jugadores, entrenadores y hasta presidentes, la formula vive cambiando y no tiene un proyecto o “proceso” estable, pero siguen peleando por cosas importantes.
La sangre nueva en Argentina puede darle una alegría. Fuente: Selección Argentina
“La Albiceleste” tiene un lunar y es que antes clasificaba como primero o segundo a las citas mundialistas, hoy lucha por entrar, de forma agónica pero ingresa al fin. Ahora sin la “generación dorada” y con futbolistas completamente nuevos, vuelve a ser protagonista. Te puede gustar o no, pero está entre los cuatro mejores de América. Sin un fútbol vistoso se ha convertido en un equipo que parece no depender de Messi, lo que puede ser un problema para sus rivales. Desde Catar hasta Venezuela encontró una versión más firme. Pasamos años diciendo que ellos tenían mejor equipo a nivel individual pero ¿Armani es más que Muslera? ¿Paredes más que Bentancur?
Deberíamos replantearnos varias cosas, ellos hace 26 años que no obtienen un solo título pero al menos siempre son protagonistas. Eso sí, una selección como la Argentina tiene que ser campeona.
Uruguay admirado a nivel mundial por su entrega. Fuente: Getty Images
El mundo admira a la celeste por su garra, entrega, corazón y amor por la camiseta. A un entrenador que ha logrado controlar lo que era un vestuario desordenado, el mismo que consiguió armonía en una interna plagada de problemas. Podemos decir que los conflictos se solucionaron rápido, los mismos que a nuestros vecinos les vienen ocurriendo hace años.
Se implementó un nuevo sistema en la celeste además del proceso, dirían en Argentina “Un Club de Amigos”, jugadores que muchas veces no merecían estar y estuvieron. Futbolistas sin continuidad que siempre rindieron u otros que no llegaron ni a eso pero aun así fueron parte de la convocatoria.
A favor podemos hablar sobre la clasificación a los mundiales, ahora somos protagonistas en Eliminatorias, cosa que nos costó mucho tiempo. Con el correr de los años el “Club de Amigos” se fue terminando, aunque todavía hay futbolistas con méritos que siguen sin entran en la convocatoria de Tabárez.
No queremos hablar de lo que pasó hace mucho tiempo, sino de lo más reciente, una anticipada eliminación, otra vez, como en la Copa América 2015 y 2016, nos quedamos en la fase de grupos, ahora en 2019 afuera ante Perú por penales.
Gargano y Arevalo Ríos ante Perú. Fuente: El Bocón Perú
Tenemos la materia prima pero no sabemos utilizarla, pasamos de tener un mediocampo raspador a uno de juego y jugamos de la misma forma que hace 13 años. Variaran algunas cosas en la receta pero el plato es el mismo, pelota para que el delantero la peine y de ahí viene “la nuestra”. Éramos candidatos y somos la selección más ganadora del torneo, era una obligación la victoria. Fuimos de más a menos en Brasil, así terminó la ilusión.
Nos conformamos con ser cuarto-finalistas, ojo, en la Copa del Mundo quedamos eliminados ante la campeona, pero lo de ayer es inadmisible en cualquier transcurso de nuestra rica historia. No por ser Perú y descalificar a los jugadores peruanos, puede pasar, pero guardarse dos sustituciones en un 0-0 con jugadores fundidos desde lo físico es increíble, para peor la pelota no quiso entrar de forma licita. Lo de Stuani fue un cambio para los penales, no para el partido. Siendo superiores, fallamos en el esquema y en el sistema, y lógicamente en no hacer goles. No importa si eran válidos o no, se han anulado miles de mala y buena manera, ahora como todo es más “transparente” nos quejamos con propiedad. Con o sin fundamentos buscamos una excusa, nos han favorecido y nos han perjudicado toda la vida.
El maestro Tábarez perdió ante Perú. Fuente: Fox Sports Asia
Ayer, el entrenador se equivocó y no es la primera vez, regaló un primer tiempo, como contra Chile, después se acomodó porque era evidente el cambio de sistema. Pero no es ese el único problema, cuando se le piden explicaciones al técnico, este no tiene autocrítica, queremos saber lo que piensa, que asuma sus errores, no que siga siendo soberbio tratando de amateurs a los periodistas, al final de cuenta es nuestro trabajo escuchar lo que usted dice.
Maestro, si nosotros nos equivocamos, como no lo va a hacer usted con la vasta trayectoria que tiene al frente del seleccionado.
“Hay que tener memoria” dicen muchos, otros responden “Un título en 13 años y un juego intermitente” y hasta algunos argumentan “¿Qué es jugar bien?”. Uruguay tiene que ser protagonista ayer, hoy, mañana y siempre, y hace mucho tiempo que no es así en este ciclo.
Los resultados marcan una tendencia, no pedimos la cabeza del entrenador, pedimos un cambio en el “proceso”, que la cabeza siga siendo la misma pero desde otro lugar.
Vieron, Argentina después de todo, tan mala no era.