Nos vemos el viernes

El partido comenzaba tan parejo como vibrante, Trouville liderado por unos fantásticos porcentajes desde más allá de los 6.75 y con una gran actuación de Federico Soto y Damián Tintorelli parecía decidido a tomar las riendas del partido, pero a partir del talento personal de Dwayne Davis, Aguada lograba mantenerse en partido. Si bien con el correr de los minutos Trouville parecía finalmente imponer las condiciones del juego, abriendo la máxima de 9 y jugando a un nivel altísimo, Davis seguía haciendo de las suyas y mantenía al aguatero en partido, finalizando el primer cuarto 3 abajo. En el segundo cuarto el trámite se mantuvo, pero no los porcentajes. Con la salida de Davis Aguada perdió el único rastro de claridad ofensiva que había tenido en el primer cuarto y el rojo de Chucarro, sin repetir el gran rendimiento de los primeros 10 minutos logró seguir estirando la ventaja, para irse al descanso largo 40-32 arriba.

En el complemento Trouville continuó manejando el ritmo del partido, mostrándose muy superior a su rival, con un Manuel Mayora totalmente encendido. Por su parte Aguada sin demasiadas luces y en base al talento individual logró mantenerse en juego. En el último periodo el trámite se mantuvo, el rojo era más y desde el esfuerzo colectivo lograba lastimar a Aguada, pero las individualidades rojiverdes le tejían un manto de dudas a la definición del juego, que finalmente fue para Trouville en cifras de 87-78.