Foto: Danubio Fútbol Club.
Tarde soleada en el Prado, el barrio de la primavera por excelencia, hasta ahí nos fuimos para ver Cerro-Danubio, dos equipos que no atraviesan un buen momento institucional ni deportivo, buscando la victoria como agua en el desierto, como ese barco que te deje en una isla de tranquilidad hasta el domingo que viene.
Así arrancó el partido, de arranque nomás Martin González se lesionó y obligó a la variante en el conjunto cerrense, Emiliano Diaz entró en su lugar. A los 7’ se produjo la única situación de peligro extremo en el primer tiempo, el interminable Maureen Franco quedó mano a mano con Cristóforo, se abrió y quedó sin ángulo, el balón se fue apenas afuera. A los 27 se dió otra variante por lesión en Cerro, Klein salió sentido y Richard Núñez entró en su lugar. La primera mitad terminó con Danubio como dueño de la pelota pero con Cerro con la chance de máximo peligro.
La segunda parte arrancó de igual manera, buen ritmo por momentos y por momentos un partido trabado en mitad de cancha. Danubio siguió con el dominio de la pelota pero sin generar peligro y Cerro apostando al contragolpe, así fue que en el minuto 57’ triangularon Tancredi, Franco y Casas, este último se lo perdió en la boca del arco de manera increíble. Recién a los 58’ entró el hombre del partido, Briam Acosta, en la primera que tocó por derecha ya generó cierto peligro. A los 69’ entró Juán Manuel Gutiérrez que duró menos de 20 minutos en cancha, se fue expulsado a los 86’ en una jugada muy polémica donde Ferreira lo expulsó al interpretar que fue de manera vehemente contra el rival. Tras esto todo parecía que terminaba en un 0-0 gigante hasta que en el minuto 93’ se desató la locura en blanco y negro, córner y tras un desvío en el primer palo apareció el “soldado” (como lo bautizó Felipe Cotelo) Briam Acosta, 1-0 y a otra cosa. Así se fue la tarde y el partido.
Danubio vuelve a ganar tras 3 meses y 20 días (9 partidos), lo cierto que el equipo sigue sin jugar bien pero era necesaria una victoria para trabajar con tranquilidad, el hincha es consciente de todo esto, de lo malo y de lo bueno, sabe que el paladar está lejos de satisfacerse pero que a veces en el camino son necesarios estos triunfos para tomar confianza. No hay mal que dure cien años, ni cuadro que lo resista.
Formaciones:
Cerro: Formento, Izquierdo, González (6’ Emiliano Diaz), Alonso, Puente, Pellejero, Klein (Richard Núñez 27’), Viera, Tancredi, Casas (Peraza 77’) y M.Franco.
Danubio: Cristóforo, Felipe, Victorino, Goñi, Pantaleone, Siles, Rodríguez, Grossmüller (Gregorio 83’), Mederos, Labandeira (Briam Acosta 58’) y Paiva (JM Gutiérrez 69’).
Goles: Briam Acosta 93’ (DAN).