Foto: Marcos Ferreira
Llegó en un momento complicado, pero con cuatro triunfos en cinco presentaciones logró el ascenso de Olivol Mundial a la Liga Uruguaya. Gustavo Reig charló con Salimo’ en plenos festejos.
“Una alegría enorme, lograr un ascenso con un cuadro que hace cuarenta años que no está en la Liga, que es un cuadro humilde, un cuadro de cinco o seis dirigentes que apoyan, que le dan todo al equipo, es una alegría inmensa” comenzó diciendo el Colo.
Al respecto de lo que pudo aportar al equipo, contó: “Fueron dos semanas recontra intensas, casi no practicamos por qué al jugar día por medio no pude entrenar. En las dos semanas, hicimos dos prácticas de media hora, después fue mucho video. No pude meter mucho el diente, le fui al corazón a los jugadores y por ahí dio su fruto”.
Tras la salida de Martín Sedes, Reig tomó el equipo sin dudarlo, claramente convencido de que se podía cumplir el objetivo: “Agarré porque me tenía confianza yo mismo y Olivol venía jugando bien, porque si terminó tercero era porque había hecho un buen básquetbol. Quizá los últimos partidos no habían sido buenos pero los jugadores estaban, hay jugadores de mucha experiencia para El Metro, muchas veces no nos damos cuentas de esos pequeños detalles. Yo sabía que iban a dar el corazón, de repente nos podían ganar, pero iban a dar todo y la personalidad para salir adelante se demostró en la cancha”.
“Los partidos con Unión y está semis, corrimos siempre de atrás, Olivol había pasado dentro del campeonato que iban perdiendo por veinte y perdieron en la última bola. Es un equipo muy sacrificado, de mucho corazón, de mucha garra que tiene esa característica, el corazón que pusieron cuando la cosa venía fea, en la cancha, fue lo que nos sacó a flote” analizó el DT sobre esa actitud que caracterizó al equipo a lo largo de la temporada.
Para terminar, contó por dónde pasó la clave para poder llevarse la serie ante Stockolmo: “Los primeros dos partidos fuimos ampliamente superados, ellos jugaron mejor que nosotros, circulaban mejor la bola, tienen jugadores muy determinantes para la división, nosotros de alguna manera fuimos llevando el partido para donde nos servía. Entreverar, raspar, jugar al límite y hoy fue el mejor partido desde que llegué”.