Aurinegros y tricolores cerraron un 2020 para el olvido, sin títulos y humillados a nivel internacional, pasaron con más pena que gloria.
Comenzamos el análisis con quien tuvo mejor año de los dos, claramente fue Nacional. Líder de la tabla Anual, con seis puntos de ventaja de Rentistas (tiene un partido menos).
Sin embargo, el año tricolor no comenzó de la mejor manera, ya que en el mes de febrero perdió la Supercopa ante Liverpool en el Campus de Maldonado. A pesar de ello, el conjunto dirigido por Gustavo Munúa inició de buena forma la Copa Libertadores, donde consiguió cuatro victorias en sus primeros cuatro encuentros y obtuvo 15 puntos de 18 posibles.
Pero, todo lo contrario ocurrió en el Torneo Apertura, donde en los primeros cuatro partidos, solo consiguió tres puntos, resultado de tres empates (Cerro Largo, Wanderers y Peñarol).
Cuando todo apuntaba a la destitución de Munúa, llegó la victoria ante River Plate en el Parque Saroldi y a partir de allí no perdió más en el torneo. Sin embargo, en el momento en el que el equipo tenía que liquidar el torneo, obtuvo dos empates ante Boston River y Deportivo Maldonado que lo condicionaron a jugar una final ante Rentistas.
Al igual de como comenzó el año, el tricolor volvió a perder una final ante un club denominado “chico” y con ésto, cayó el despido de Munúa a cargo de Nacional.
El Torneo Intermedio, el tricolor lo comenzó de forma magnifica, asegurándose su grupo de forma anticipada y parecía que Jorge Giordano le había encontrado la vuelta al equipo y seguiría él en el cargo de DT. Pero, la derrota clásica y la derrota ante River Plate de Argentina por Copa Libertadores de forma abultada, hace precipitar un cambio de entrenador, el segundo en lo que va del año y del campeonato.
La derrota ante River Plate de Argentina
Algo similar, ocurrió en Peñarol, pero con peores resultados. Los aurinegros, en el 2020 directamente no jugaron una final y el Torneo Apertura lo terminaron cuatro puntos por abajo de los líderes.
Pero, a pesar de tener poca diferencia en el torneo, tuvo que cambiar de entrenador en el medio del mismo, cuando fue destituido Diego Forlán. Aquel encuentro ante Wanderers, terminó siendo lapidario para el ex futbolista de la selección uruguaya.
Sin embargo, la llegada de Mario Saralegui no le dio la eficacia que le faltaba al mirasol, que terminó padeciendo a lo largo del año. La Copa Libertadores volvió a ser el lamento que viene ocurriendo desde hace nueve año atrás, cuando en cada edición no puede superar la fase de grupos. Esta vez, quedó eliminado a manos de Jorge Wilstermann y Atlético Paranaense. Pero, lo que hace aún peor no mal año a nivel internacional, es que accede a la Copa Sudamericana y no puede superar a Vélez Sarsfield en la primer ronda que disputa.
A su vez, dejó de lado el Torneo Intermedio y llegó a quedar a 13 puntos de Nacional en la tabla Anual, diferencia que hoy es de siete unidades.
Al igual que Nacional, ya consumió a un DT y Mario Saralegui va a correr por el mismo camino, de acuerdo a los dichos de Ignacio Ruglio, nuevo presidente de la institución.
Lo único positivo para el hincha aurinegro, que no debería ser consuelo, es que en el 2020 no perdió un clásico.