Con Tito a la final

Cómo era de esperarse, Bayern Munich rápidamente salió en busca del partido y dominó al equipo egipcio en todas sus facetas. El gol se veía venir, pelotas de todos los sectores caían al área del equipo africano que hacía lo imposible por parar a las estrellas pero no hacían pie en el encuentro cuando manejaban la pelota. A los 17’ el balón le quedaría servido a Robert Lewandowski y el mismo no tardaría en mandarla al fondo de la red. A pesar del tanto bávaro, el partido no se modificó. Al Alhy no encontró vías para inquietar a Neuer mientras que los dirigidos por Hans Flick se limitaron a dominar, tener situaciones claras de gol pero no lograron ampliar diferencias.

El segundo tiempo comenzó mejor para el equipo más laureado del mundo. Lograron manejar más tiempo el balón y tuvo alguna que otra chance pero sin inquietar demasiado al portero germano. Poco a poco se fue diluyendo el buen momento de los africanos y una vez más Bayern tomó las riendas del juego sin preocuparse demasiado por anotar. Ya llegando al final del encuentro, un centro a espaldas del portero hizo que el delantero polaco solo tuviera que empujarla para anotar el segundo y cerrar el resultado. Digno partido de los egipcios ante un equipo alemán que, con poco, logró llevarse el juego.