Aguada venció a Nacional en cifras de 96-90 jugando como local en la noche de viernes en el marco de la LUB.
Un partido dominado por parciales. Cuando un equipo encadenaba 10 puntos seguidos, el rival le respondía con una racha similar, pero el que comenzaba derecho era el bolso, que disimulaba la baja de Esteban Batista, soportado por la puntería de John De Groat que estuvo en un nivel espléndido.
A Aguada le hizo bien el ingreso de Demian Álvarez, quien rompió hacia el aro en reiteradas ocasiones encontrando sus propios puntos o descargando para sus compañeros internos quienes en la caída consiguieron anotar o sacar faltas. Callistus Eziukwu sufrió con las personales.
Nacional abrió renta de doble dígito de cara al descanso largo pero a la vuelta del mismo, el local fue un vendaval y descontó los 11 puntos de distancia e incluso pasó a ganar, alternándose en el marcador con diferencias muy cortas entre sí. Dwayne Davis tomaba la batuta del equipo de Germán Cortizas que vio como Sebastián Izaguirre de buen rendimiento debió ir al banco de suplentes por comprometerse en cuestiones de faltas.
El final fue de infarto. Un confiado De Groat era quien más miedo infundía en el público de la Avenida San Martín, pero tras un gesto a la tribuna que derivó en una falta técnica, el foráneo bajó sus porcentajes y las ofensivas fueron asumidas por el siempre confiable Anthony Danridge. De todas maneras, el barbudo Davis quiso ser el superhéroe de la noche y tuvo un último período de ensueño, convirtiendo desde los 6,75 y atacando el aro con criterio. Se puso a todo Aguada sobre los hombros y terminó dándole la victoria a su equipo en un final muy cerrado.
El extranjero perimetral culminó con 30 puntos, 8 rebotes, 6 asistencias y 7 faltas recibidas. Por el lado del perdedor, De Groat firmó 32 unidades, 6 rebotes, 3 robos y 7 faltas recibidas. El nuevo entrenador aguatero acumula cuatro triunfos en fila y se viene el clásico…